
El 27 de julio del año 2015, sí hace exactamente una década desde aquel momento, Gabriel Heinze tenía que volver a explicar por qué no podía dirigir a Godoy Cruz (el equipo que lo había contratado como DT) desde el campo de juego y tenía que seguir los partidos desde un palco.
“Se está tramitando un permiso”, fue la respuesta que se presentó a la prensa tras varias consultas en torno a este escenario que, finalmente, estaba vinculado a la situación del Gringo, quien estaba finalizando sus estudios como DT y no había recibido su licencia final que habilitase para desempeñarse en tal rol.
Más allá de este caso puntual, lo que se busca reflejar a través de dicha anécdota, es la evolución que ha vivenciado la carrera de entrenadores en nuestro país y en el mundo alcanzando una profesionalización como nunca antes.
De tal forma, a lo largo y ancho de la Argentina se encuentran distintos espacios de formación que persiguen el objetivo de brindar herramientas y formación a personas interesadas en adquirir conocimientos para liderar un equipo de fútbol. En tal sentido, un caso con el que tuvo contacto este medio fue la escuela de La Plata llamada “Adolfo Pedernera”, que conduce el exjugador y DT Carlos Figueroa.
Vale recordar que, Figueroa, supo vestir las casacas de Gimnasia y Esgrima La Plata e Independiente, entre otros equipos. Tras tener un breve paso por el fútbol internacional, se retiró del profesionalismo y se formó como DT validado por la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino (ATFA). Allí se vinculó con notables figuras del fútbol nacional y comenzó a dar sus primeros pasos como ayudante de campo de Roberto Rogel en Quilmes y San Lorenzo.
Sin embargo, a partir del año 1985, Figueroa, formó su propio cuerpo técnico y asumió como DT en Independiente Rivadavia de Mendoza. Así comenzó una distinguida carrera por Deportivo Armenio, Guaraní Antonio Franco de Posadas y Temperley.
Noticias Argentinas.com entrevistó al director de la escuela de técnicos de la escuela platense “Adolfo Pedernera” para conocer más acerca de su metodología de trabajo, el posicionamiento de la carrera de entrenador como una alternativa laboral más en el presente y los desafíos de cara al futuro.
-¿Cómo surge la escuela de técnicos Adolfo Pedernera?
-En el año 86 surge la necesidad de despegarse de la formación de la estructura de Asociación de Fútbol Argentino (AFA), le planteamos a Julio Grondona crear la primera escuela fuera de AFA en La Plata y llevé el proyecto con Adolfo Pedernera, a quien le propongo que lleve su nombre.
-¿Por qué le pongo ese nombre?
-Pedernera me acepta porque coincidíamos en los valores de todo del fútbol y de la vida. Creo que él reúne la condición como un gran futbolista seleccionador y fue un gran líder de todo el fútbol argentino: hizo la huelga del 48 donde tuvieron que ir los jugadores a una liga pirata que era en Colombia, que estaba desafiliado de la FIFA. Fue un gran gremialista, un gran jugador y un gran técnico. Cuando le dije de poner la escuela, como teníamos muy buena relación, no dudó un minuto y aceptó porque él no se iba a quemar con un tipo que se maneje con otros valores. Lo fundamental de nuestra relación radicó en que coincidíamos en los valores: disciplina, honestidad, fraternidad, valentía y respeto. Ello plasmado en el fútbol y en la vida.
-¿Cuál es el tipo de egresado que se busca tener?
-El fútbol es un deporte que une todas las razas, todas las clases sociales. No tenemos un estereotipo definido. Podemos decir que el tipo de egresado que se busca es aquel que quiere superarse, ya sea que se desempeñe en una liga regional de la provincia o en la selección nacional. Tenemos todo ese abanico de egresados en nuestro recorrido.
-¿Qué personalidades conocidas han egresado de allí? ¿Cuál es un número aproximado de egresados?
-Passarella y Sabella fueron alumnos en nuestras aulas cuando las clases se dictaban en el Colegio Nacional de La Plata. El primer curso de la escuela en el año 88 estaba conformado por los campeones del mundo del 78. También hubo muchos futbolistas profesionales como Rubén Capria, Bernardo Romeo, Andrés Yllana, Leandro González, Azconzábal, el Pampa Sosa, Lucas Licht. La mayoría vinculados al fútbol de La Plata, pero hay muchísimos más que no han jugado de manera profesional pero sí que se han acercado desde chicos a este deporte con todas las ganas de que el futbol sea parte de su día a día.
-¿Por qué es importante pasar por una escuela de DT?
-Sobre todo por el aporte de herramientas multidisciplinarias que da la formación. Porque el jugador de fútbol, hay algunos que asimilan el vestuario y otros no. Hay algunos que incorporan a través de los técnicos que tuvieron conocimientos, pero hay otros que no asimilan absolutamente nada. Y la escuela lo va a ordenar en las cuestiones técnicas, en las cuestiones tácticas, en la conducción, en los conflictos. Todo eso se tiene que preparar el técnico para dar la primera charla ante una presentación, para saber cómo reaccionar ante la derrota y ante el triunfo. Todo lo que pasa con el fútbol y con todos los jugadores, los conflictos que hay con el periodismo, con los dirigentes, con los mismos jugadores que no responden.
-¿En qué se lo puede ver plasmado?
-Hoy la formación tiene una estructura de materias como neurociencias aplicadas al fútbol, psicología del deporte, gestión de equipos, historia del fútbol, metodología de enseñanzas, planificación, entre otros. Cada una de estas disciplinas están enfocadas al rango de categorías de edad que se está cursando. Los tres años de la carrera tienen unos lineamientos específicos y cada año se finaliza con un título por categoría. A efectos legales por llamarlo de alguna manera, también hay que decir que hay que pasar por una escuela porque es un título habilitante. Si no tenés la formación aprobada con el documento analítico registrado en ATFA, no podés dirgir en ninguna liga oficial.
-¿Qué análisis hace de lo que es el estado de los entrenadores del fútbol argentino actual?
-Que somos un país “semillero” en DT de fútbol, lo vemos en los mundiales la cantidad de técnicos argentinos dirigiendo en diferentes selecciones. Y fuera de los mundiales, en las ligas más importantes del mundo hay un sinfín de argentinos dirigiendo que se supieron adaptar a los cambios generacionales pero también a las dinámicas, incluso a las estructuras empresariales que dominan hoy el fútbol. Seguimos pisando fuerte.
-¿Cuáles son los objetivos que se trazan desde Pedernera a largo plazo?
-Siempre estar abiertos a mejorar, a modernizarnos. Desde el 2018 Conmebol asume la responsabilidad de la formación de DT y es el organismo mediante ATFA manda los lineamientos. Nosotros nos adaptamos a ellos, pero también fuimos dando nuestro aporte, como por ejemplo crear una estructura de módulos por materias, potenciar el fútbol femenino dándolo en clases cuando no es una asignatura curricular y fue bien recibida en ATFA e incluso copiada por otras escuelas. Mantenemos parte histórica de nuestra plantilla, pero incorporamos un montón de nuevos profes que hagan de puente generacional para poder llegar a los alumnos según sus dinámicas actuales. Va todo muy rápido asique siempre hay mucho por mejorar y tenemos el propósito de hacerlo.
Finalmente, con más de cinco décadas de referencia en el sector, la escuela platense “Adolfo Pedernera”, durante marzo de este año, inició un nuevo ciclo lectivo para seguir formando jóvenes y nutriendo el fútbol nacional para los futuros desafíos que surjan con el desafío de, quizás en algún tiempo, tener al próximo DT de la selección formado en su escuela.