
Diez años en emisión no es algo que consiga cualquier serie. Incluso si no equivale a diez temporadas, Stranger Things ha conseguido esa proeza. Y lo hace presentándonos su inminente final con el que esperan batir todos sus récords y cerrar una historia que ha mantenido atrapados y fascinados a millones de personas a lo largo de todos estos años. Incluso si ha habido algún que otro bache por el camino y un evidente desencanto en las dos últimas temporadas por parte de la crítica y los fans.
Estrenada el 15 de julio de 2016, Stranger Things es una creación de los hermanos Matt y Ross Duferr. Si consiguieron sacar adelante la serie es porque el año anterior habían terminado el guion de una película, Hidden, que imitaba el estilo de M. Night Shyamalan. Aunque la película no fue un gran éxito, llamó la atención del productor Donald De Line, lo que les permitió trabajar con el propio Shyamalan en su propia serie, Wayward Pines.
Tras aquella experiencia, los hermanos Duffer decidieron crear su propia serie de televisión. Creando un episodio piloto decidieron inspirarse en todo lo que les obsesionada. Las películas del cine de terror clásico, Dungeons & Dragons y también los experimentos gubernamentales de los 80s. El resultado, fue prácticamente idéntico al primer episodio de Stranger Things.
No tuvieron problemas en vender la serie a Netflix, que compraron toda la primera temporada por una cifra que no ha salido a la luz. Aunque fuera cual fuera, les salió barato. Porque durante los primeros 35 días del estreno de la serie, 14.07 millones de personas entre los 18 y 49 años vieron la serie. Sólo en EEUU. Recibiendo un asombroso 97% en Rotten Tomatoes y un mucho más discreto 76 en Metacritic, la serie fue excepcionalmente bien recibido por crítica y público.
De hecho, no es una exageración decir que Stranger Things se convirtió en un fenómeno cultural de la noche a la mañana. Los grupos que sonaban en la serie se volviera de nuevo populares, Dungeons & Dragons tuvo un renacimiento asombroso gracias a la misma y sus actores pasaron a ser conocidos por todo el mundo. Algo que sólo se amplificó con el paso de las temporadas.
Subsiguientes temporadas han seguido arrasando entre el público, demostrando que estaba lejos de ser flor de un día. La segunda y la tercera temporada en particular brillaron en este frente, con esta segunda rompiendo todos los récords históricos de Netflix. 40.7 millones de personas vieron la serie durante los primeros cuatro días desde su estreno. Aumentando hasta 64 millones cuando hablamos de todo el primer mes.
Por desgracia para Netflix, ni la crítica ni los espectadores han sido tan indugentes con su opinión sobre la calidad. Aunque la segunda temporada se suele considerar tan buena como la original y eso se refleja también en la crítica (un 94% en Rotten Tomatoes y un 78 en Metacritic), es fácil ver el descenso de calidad y el hastío a partir de la tercera. Con un 89% y un 72 en Metacritic, es un descenso dramático. Que sólo irá a peor en una cuarta temporada que no sólo no batirá récords de audiencia, sino que sólo tendrá un 86% en Rotten Tomatoes y un 69 en Metacritic.
¿La razón? Ciertos signos de agotamiento y repetición. La serie comienza a repetirse, se centra más en sus personajes y las amenazas ya no se sienten tan frescas ni sorprendentes. Algo que le pesa especialmente a una serie que se centra más en los misterios y el impacto de los sucesos que en la profundidad de sus personajes o sus tramas.
Nada de eso quita para que esta quinta temporada esté siendo esperada con gran expectación. Y que bien puede remontar. No es sólo el final sino que además, han prometido volver a lo que mejor saben hacer: las luchas contra el mal y los chicos uniéndose para descubrir grandes misterios. Yendo en busca de Vecna para acabar con él de una vez por todas mientras descubren que ha sido de sus víctimas, esta quinta temporada promete cerrar todas las incógnitas que nos ha dejado la serie hasta el momento.
¿Pero será este el punto y final de la serie? De Stranger Things, como serie, sin duda. Como franquicia, es más dudoso. Dado el éxito de la misma, es probable que quieran explotarla en forma de spinoffs de toda clase. Aunque aún está por ver qué harán.
Hasta entonces, tenemos que esperar al estreno de la quinta temporada. Que es inminente. Se estrena el 26 de julio en Netflix, prometiéndonos ese cierre que llevamos anhelando ya casi diez años. Si será satisfactorio o no es cuestión de horas. Pero lo que es seguro es que, sea cual sea el resultado, va a dar mucho que hablar. Y que el viaje ha merecido la pena.