19/10/2025 - Edición Nº348

Nacionales

EDITORIAL DE DOMINGO

Un futuro amargo difícil de cambiar

12/10/2025 07:20 | Hay dos realidades en la Argentina, una de ellas es la que hoy trasuntan las mayorías y aunque es de esperar que después de la “ayuda” de Trump, siga imponiéndose la otra.


por por Fernando Somoza Especial para NA (*)


El próximo domingo sabremos cuál es el destino inmediato de nuestro país y con ello nuestras miserias. Tal vez dejemos de vivir en esta burbuja colmada de mentiras por parte de un gobierno liderado por un hombre extraño, que hasta el momento no ha podido cumplir ni una de sus promesas ni de sus premisas, causando junto a sus “funcionarios golondrina” un daño mayor todavía al que encontraron en los finales del 2023.

El escenario no es novedoso, pero sí previsible y eso es lo que preocupa todavía más.

Los analistas ven probable que Mauricio Macri que se quedó con ganas después de la derrota de 2019 -con ganas de más negocios, no de gobernar- ocupe un lugar preferencial en el toma y daca del gabinete, entrando glorioso al gobierno de un Milei que se encuentra dando sus manotazos para seguir aferrado a un poder tóxico que contamina todo lo que toca, principalmente a sus representados.

Ese gobierno bicéfalo que se avecina, no hará más que refundar una administración como la aparecida allá por los ’70 con Alfredo Martínez de Hoz y que se constituye en una matriz especulativa favorecedora de los sectores más poderosos de la economía, dejando de lado la justicia social de la producción, tal y como fue progresando nuestro país hasta el siglo XX, con diferencias sustanciales respecto a otros de Latinoamérica.

Y hablando de bicéfalos, hay en redes un artículo escrito por Alfredo Eric Calcagno y Eric Calcagno, padre e hijo respectivamente, ambos economistas y de exquisita capacitación y trayectoria que recomiendo leer completo: https://www.nuso.org/articulo/el-monstruo-bicefalo-de-la-renta-financiera/

Titulado “El monstruo bicéfalo de la renta financiera”, los autores trazan una descripción precisa de esta situación que transitamos, como tantas otra que ocurrieron a lo largo de más de medio siglo.

Lo que resulta llamativo, o no tanto, es que el trabajo haya sido publicado en el año 2002 en medio del caos económico y social que vivíamos debido a las recetas de igual corte a las que acontecen por estos años, por estos días, por estas horas.

Tal como lo expresan “El artículo analiza los mecanismos utilizados para implantar, desde mediados de los años 70, la actual estructura económica y social en la Argentina. El modelo rentístico convirtió al sector financiero, cada vez más transnacionalizado, en dominante económico y político, con un poder en crecimiento, ya sea bajo gobiernos militares o civiles. El resultado ha sido una economía nacional prendada, un Estado sin instrumentos de política económica y con administraciones cautivas sin aspiración a alcanzarlos, y una sociedad arruinada. Mientras tanto, es de esperar que las nuevas energías políticas y sociales puedan dejar atrás el actual sistema rentístico. En definitiva, el fin de un régimen y el comienzo de otro siempre ha estado determinado en la Argentina por la apropiación de la renta”.

Al a hora de establecer una conclusión los economistas inquieren: “Frente a esta situación, ¿qué puede hacerse? El primer cambio es político. Si el sistema político sigue siendo un reducto del poder rentístico financiero internacional y nacional, nada podrá construirse. El requisito esencial es, pues, expulsar del poder al conglomerado que hoy lo maneja. Mientras el excedente económico generado por la sociedad sea apropiado por ese grupo y destinado a otros fines que la acumulación productiva, no habrá horizonte visible”.

Como si leyéramos hoy algún portal especializado se expresaban hace ya 23 años: “De este breve examen surge con evidencia que el sistema rentístico que hoy nos agobia no solo es retrógrado en lo ideológico. Además es troglodita en cuanto a su origen y modo de funcionamiento. Esta nueva clase dirigente salió de las «cuevas»12 financieras que contribuyeron con avidez al vaciamiento del país.

Más aún: ahora consideran a la Argentina como una «gran cueva» en donde ellos mandan. Como en la caverna de Platón, ven danzar sombras en el fondo de la gruta, tales como los vaivenes financieros, los índices fiscales y las «señales» del mercado. Confunden así sombras con realidad, pero eso no les impidió alzarse con todo lo que encontraron. Les muestran las sombras a los incautos, mientras ellos se llevan bienes y rentas. Se apropiaron para su patrimonio de las rentas financieras, de los servicios públicos privatizados y de los recursos naturales; implantaron un sistema y una práctica fiscal que consagra sus apetencias. Convierten en negocio personal todo lo que tocan. Ahora las llamadas reformas de «segunda generación» apuntan a la apropiación rentística de la salud, la educación, el trabajo, la seguridad y la defensa de los argentinos”.

No hay forma en el horizonte de salir de la asfixia que provoca este modelo en las mayorías que, a pesar de ello en muchos casos se disponen a pegarse un tiro en el pie, aunque algunos ya les queden los muñones.

El camino en estos años ha sido amargo y no se ven muestras de cambio frente al poderío político y comunicacional de estos grupos poderosos que entremezclan sus negociados cada vez con mayor desvergüenza, incluyendo la corrupción, la estafa y el narcotráfico, mientras los pueblos se sumen en la pobreza.

(*) [email protected]